
Foto: M.A. Forniés
LA MAGIA DE HUESCA
Querido Julián,
si algún día paseas por el Coso y te cruzas con un tipo afroamericano de unos cincuenta años y más de dos metros de altura, has de saber que es muy posible que esa persona se haya enfrentado a Michael Jordan.
Vamos más despacio porque acabas de nacer y es muy posible que aún no sepas quien es Michael Jordan, pero se trata del mejor jugador de baloncesto de la historia, un deporte bello, que fomenta la táctica, y ejercita tanto piernas, brazos como puntería.
Y el tipo de dos metros que acabas de ver por el Coso se llama Granger Hall.
El encuentro con Jordan fue en un partido de liga universitaria estadounidense, un tanto intrascendente, pero no todo el mundo puede decir que se ha enfrentado a Jordan.
Y tampoco a Patrick Ewing, el número 1 del draft de la NBA en 1985, año en el que Granger Hall quedó en el puesto 78, en cuarta ronda del draft, seleccionado por los Phoenix Suns.
He leído que uno de los motivos por los que Hall no tuvo una carrera en la NBA fue una lesión que tuvo en la época universitaria, pero lo cierto es que se trata de la liga más exigente del mundo, y un mínimo bajón te condena al ostracismo.
En lugar de ser carne de banquillo, se vino a España, a jugar durante la temporada 85/86 con el Forum Valladolid.
Hizo buenos números (más de 22 puntos por partido) dentro de una liga que a pesar de tratarse de uno de los deportes de moda en el país, tenía un nivel de baloncesto muy diferenciado con respecto al de Estados Unidos.
Tras esta entrada en el campeonato, al cual llegó con la idea de aprender español e historia para acelerar su adaptación, fichó por el Huesca La Magia y se convirtió en uno de los ídolos del equipo.
Al principio hubo cierto escepticismo con su fichaje, le tildaron de individualista, aunque rápidamente acalló los rumores.
En Huesca estuvo seis años, incorporándose cada temporada más tarde en sustitución de otro compañero americano, no le gustaba la disciplina de las pretemporadas, por suerte, tenia un fisico que le permitía eludirlas sin que se notase.
Granger no eran un fino estilista como su Brian Jackson (la otra estrella del Peñas), tenía una mecánica de tiro un tanto peculiar pero efectiva y sobre todo, destacaba su carácter ganador, su lucha y su entrega.
“Debajo de los aros había muchos kilos, muchos brazos, muchos codos, muchos esfuerzos”.
No daba un balón por perdido, se fajaba contra jugadores más grandes y más pesados y sabía cómo ganarles la partida llevándolos a su terreno.
Junto a Brian Jackson formó una de las parejas más temidas de la liga, con ellos el Peñas llegó a convertirse en un equipo histórico, con grandes victorias sobre el Real Madrid de Petrovic o el Barça de Epi y Solozabal.
Hall era un tanto anárquico en el juego y no ponía demasiado interés en aprenderse los sistemas; algo que llegó a sacar de quicio a algún que otro entrenador.
Además de la experiencia deportiva, Granger conoció a su actual esposa, María Jesús Abió, en Huesca, con la cual tienen dos hijos.
Cada cierto tiempo regresa a Huesca, pues aún mantiene casa en Almudévar, en esas visitas aprovecha para conceder algunas entrevistas plagadas de recuerdos.
“Echo de menos la paella, la longaniza de Graus, el jamón y el marisco”.
“Un día jugamos contra un equipo de Tenerife con 20 grados bajo cero y toda la gente estaba en el pabellón con guantes y gorros. Yo me acuerdo de esto más que nada, aunque en Ohio hace mucho más frío”.
“El pabellón siempre estaba lleno; jugabas contra Lugo y estaba lleno, y cuando lo hacíamos con el Madrid, Barcelona, Zaragoza y Joventut, más lleno todavía. Es un buen recuerdo”.
Además, al ser un tipo tan alto, no puede pasar de forma discreta, y como la gente aún se acuerda de él y le guarda cariño, en alguna cabalgata de San Lorenzo le han parado para cantarle el célebre, 1, 2, 3… ooolé, grito que realizaba el público cada vez que el pívot se disponía a lanzar un tiro libre.
Llegó a explicar ese pequeño ritual, en el que bota tres veces el balón antes del lanzamiento, durante su época de jugador:
“Quiero conseguir la línea con la canasta y tirar más alto el balón, con lo que hay más posibilidades de meter la cesta, y no lo hago solo porque sea más espectacular, cuando yo tiro no escucho a la gente, estoy concentrado”.
Granger era un tipo muy bien considerado en el barrio de San Martín, en el cual residía.
Según las crónicas de la época era algo tímido, pero luego un auténtico ciclón, simpático y bromista.
Dentro del vestuario era querido por todos pero los más cercanos fueron Joan Pagés y Eduardo Sabater. Tener amigos es importante.
“Huesca es una ciudad fría pero con una afición muy caliente. Noto que la gente me quiere mucho y se interesa por mi persona, aparte del baloncesto”.
“Una temporada más difícil por la ausencia de Pagés. Ha sido una temporada muy larga y de mucha lucha”.
“Todavía no sé cuando me marcharé porque aún tengo que recoger la casa y no sé dónde podré llevarme tantas cosas. Yo esperaré como todos los años”.
Tras seis temporadas, en julio de 1992 puso fin a su etapa peñista fichando por el TDK Manresa, en un periplo que le llevó además por Sevilla y Huelva, equipo donde finalmente se retiró en 1998, aunque Hall reconoció que esperaba jugar un poco más.
Aún así, casi veinte años después, sus números siguen asustando, es el máximo reboteador histórico de la ACB con 4292 rebotes en 433 partidos, un récord bastante difícil de superar. En la clasificación de puntos, a fecha de redacción de este artículo, va el 4º con 8036, lo que supone unos 22 puntos de media, el que más puntos entre los 40 primeros. Y el tercero en esa clasificación de máximos anotadores es Brian Jackson, tambien leyenda peñista, con 8640.
Actualmente Granger Hall reside en Ohio (Estados Unidos), trabajando en un centro escolar para niños con problemática escolar.
Pero como ya te he dicho, sigue visitando la ciudad cada cierto tiempo.
Te lo digo porque es probable que llegue un momento en el que le cojas manía a la ciudad, es algo normal, le pasa a todo el mundo, pero ya ves, en el fondo, Huesca tiene cierta Magia.
Antonio Romeo
Me ha gustado; Huesca tiene magia y conocimiento del otro como Buen vecino, , Julian ha nacido en Huesca como podría haber sido en otro sitio pero ha nacido en Huesca y el 30 de marzo como su abuelo Javier sera por algo?